Los vicios de la construcción: Arte o ruina, según se mire...

"Creando complejidad espacial, leyendo nuevas grietas contra viejas superficies"

Gordon Matta-Clark



Resulta contrapuesto pensar que se pueda hacer arte con construcciones ruinosas, si partimos de la base de que el arte es algo que por definición, lo asociamos con cosas bellas. Esta idea es algo que no le dificultaba a Gordon Matta-Clark, artista neoyorquino del siglo XX, interesado en la deconstrucción del espacio (deshacer lo hecho, para hacer algo distinto). Para llevar a cabo su obra se hizo con varias propiedades residuales y abandonadas de Manhattan, a las que diseccionó hasta convertirlas en obras de arte. Pero no solo intervino en estas, sino que realizó obras en diferentes países, una de ellas para la IX Bienal de París de 1975, en la que realizó la pieza titulada Conical Intersect.

Su legado ha quedado registrado sobre todo en material fotográfico, con el que se organizan diversas exposiciones, alrededor del mundo.

Volviendo a la realidad, supongo que si en nuestra propiedad aflorasen grietas, o una serie de deficiencias constructivas, no llamaríamos a Matta-Clark, para que hiciese arte con ella. Eso sería demasiado poético, y hoy en día está todo para poca poesía. Por el contrario, nuestras reacciones variarían según el grado de deficiencia observada, es decir, prestaríamos poca atención a aquellas que consideramos mínimas, como pequeñas fisuras que surgen por los asentamientos propios de la edificación; pero si fuesen algo notorio como grandes grietas en pilares, humedades, desprendimiento de material de fachada, etc, se buscaría enseguida la manera de solucionarlo. Normalmente con un buen mantenimiento del edificio se puede retrasar la aparición de estos defectos.

Con el boom de la construcción y el descontrol de los últimos años, se ha producido una corriente de malas prácticas entre los profesionales del sector, que ha desembocado en la mayoría de los problemas que, hoy por hoy, padecen nuestras construcciones más jóvenes. En muchos casos son como jóvenes envejecidos antes de tiempo. Por esta razón sería interesante que el propietario de una edificación ya sea unifamiliar, o colectiva, estuviese al tanto de cómo proceder en caso de que observe ciertas anomalías en su propiedad y que es lo que puede, o no, reclamar para que le sea subsanado.

A continuación se exponen los posibles defectos y su garantía:

· En el primer año, defectos de acabados.

· Hasta los 3 primeros años, defectos de instalaciones y constructivos.

· Hasta los 10 primeros años defectos en la estructura.

En teoría, no tendría que existir ningún problema por parte de la constructora, o promotora, en resarcir el daño, pero en caso de que éstas no lo acepten, habría que realizar un informe pericial con los daños que existen y demandar al responsable.

Como aclaración habría que comentar qué es un informe pericial. Cuando adquirimos una vivienda, o cualquier otro tipo de construcción, en ocasiones encontramos una serie de defectos que afectan en mayor o menor medida su habitabilidad o funcionalidad. El proceso normal a seguir, y si la construcción aún se encuentra en los primeros 10 años de vida, es hacer un listado con estos desperfectos verificando su garantía y comunicárselos al promotor, para que proceda a su reparación. Por lo general la petición del cliente será atendida y los daños subsanados, pero si se hace caso omiso ,por parte del promotor o constructor, de ésta, o estos daños no se resarcen adecuadamente, la persona deberá solicitar un INFORME PERICIAL. Este es un documento cuyo objeto final es, tener la posibilidad de reclamar todos aquellos vicios de la construcción, bajo el amparo de un documento firmado por un profesional cualificado en el ámbito de la edificación.

Por último, y a modo de consejo, sería bueno que el propietario esté atento a lo que le sucede a su edificio, y que piense que invertir en mantenimiento o hacer las reclamaciones oportunas, es una inversión a futuro que garantiza su buen estado, su valor económico, y su habitabilidad por mucho tiempo.Como nos demuestran las obras de Matta-Clark, la diferencia entre una obra de arte y una ruina puede ser tomar una decisión acertada a tiempo.